La fruta es variada y divertida. Y además, está llena de color! Sobre todo, ahora con las frutas de verano. Lo que quizás no sabes es que los colores de frutas y verduras nos dan muchas pistas sobre los nutrientes que tiene cada variedad. Por ejemplo, frutas y verduras que tienen colores tan llamativos como el rojo o el naranja (zanahorias, naranjas, tomates, mandarinas, melocotones, calabazas…) son fuente de vitamina A y de carótenos, ideales para cuidar la piel, la visión, o las mucosas. También tienen efectos antioxidantes.
El amarillo está presente en limones, ciruelas, pimientos, pomelos… y este color señala la presencia de vitamina A, carótenos, vitamina C, minerales como el potasio y polifenoles, con efectos antioxidantes y antiinflamatorios. En el caso de las frutas y verduras de color verde, como las alcachofas, o el brócoli, son fuente de polifenoles, que tienen efecto antiinflamatorio y antioxidanes.
Las frutas y verduras en colores como el azul, el morado o el violeta, como las moras, las berenjenas, la remolacha o las uvas negras, tienen compuestos fenólicos con efectos antiinflamatorios y antioxidantes. También poseen vitaminas B y fibra. El color blanco también está muy presente en el mundo vegetal, con ejemplos como la cebolla, los ajos, el plátano, las patatas o el puerro. Este grupo de vegetales suelen tener vitaminas del grupo B, potasio, polifenoles, flavonoides y flavonas, con acción antioxidante y antiinflamatoria. A veces, también tienen almidón.