Ya estamos en Navidad. Y aunque han pasado los fastos del 24 y el 25 de diciembre, todavía quedan las celebraciones de Nochevieja y Año Nuevo, además de Reyes y de todas las cenas y comidas con familiares y amigos que se van metiendo en nuestra agenda. Días de comilonas en las que no cuidamos como debiéramos nuestra dieta. Por eso, cuando estamos a punto de arrancar 2023, queremos daros algunos consejos para mantener una alimentación saludable en Navidad.
- No a los excesos. Planifica bien la compra para llenar la despensa con los ingredientes necesarios para estos días, intentando evitar los excesos y que se quede comida en la nevera que tengamos que tirar una vez pasada la Navidad. Además, este año con el problema del abastecimiento y la subida de la luz y los carburantes, hay previstas subidas de precios. Así que contra antes hagas las compras, mejor que mejor.
- Equilibra los menús. Para evitar menús demasiado pesados, trata de equilibrar los distintos platos. Si por ejemplo el segundo es un plato demasiado graso, intenta meter un primer plato más ligero y sano.
- Apuesta por la cocina saludable. Intenta cocinar al vapor o al horno todo lo que puedas para compensar los alimentos menos saludables que seguro que tomáis en estos días. Y busca siempre alternativas saludables. Por ejemplo, si vas a preparar una lasaña, puedes hacerla de verduras, en lugar de prepararla de carne.
- Aperitivos, los justos. A veces, preparamos tantos aperitivos, que cuando llegamos al plato principal, nos sentimos llenos. Prepara los aperitivos justos para no sobrecargar nuestro estómago.
- Si vas a utilizar salsas, al menos, que sean salsas caseras y olvídate de las salsas industriales, que son demasiado grasas y con exceso de ingredientes como el azúcar.
- Reaprovecha los restos de la comida. En lugar de tirar la comida que ha sobrado en Nochebuena o en Navidad, intenta reaprovechar esos alimentos para transformarlos y preparar nuevas recetas. Croquetas, revueltos, cremas… hay un montón de soluciones para aprovechar la comisa sobrante y que no acabe en la basura.
- Muévete con los peques. En los días más señalados, en cualquier casa se come más de la cuenta. Así que además de intentar equilibrar los menús, trata de salir de casa para hacer algo de ejercicio con los peques. Si no tienes ganas de salir con la bici o a jugar al fútbol, sal al menos a pasear para ver las luces de Navidad.
- No te saltes ninguna de las comidas. Al margen de las fechas señaladas, el resto de los días de fiesta trata de mantener la misma dieta de siempre, evitando saltarte los desayunos o cenas.
- La fruta, siempre presente. Sabemos que en estos días los turrones o los polvorones, entre otros dulces típicos, están presentes en los postres de cenas y comidas. Pero para tener una alimentación saludable en Navidad, la fruta tampoco puede faltar en los menús de estos días. Intenta meter siempre fruta, ya sea en ensaladas, en brochetas, o en una refrescante macedonia. La piña, siempre es una apuesta segura. Al margen de la fruta, mejor preparar postres caseros que postres industriales. Y evita repetir postres, toma siempre la ración justa.
- Ajusta las cantidades. Cuando nos sentamos a la mesa en Navidad, hay un auténtico desfile de platos. Por eso, intentemos ajustar las cantidades, evitando llenar el plato hasta arriba, o poniéndonos morados de canapés. Echa en tu plato la comida ajustada para poder probar de todo, sin pasarnos con las cantidades.
- El agua, la mejor bebida. En Navidad no pasa nada por tomarnos una copa para brindar, pero intentemos evitar refrescos azucarados y el alcohol. Lo más sano, sin duda, el agua.
Fotografía de portada: Zolotaosen para Canva.com