Reducir el consumo de azúcar se ha convertido en un objetivo de primera magnitud para responsables de las organizaciones sanitarias internacionales y para todos los que trabajamos en el ámbito de la alimentación sostenible. No hace muchos meses, la Organización Mundial de la Salud advertía del exceso de azúcares de los alimentos infantiles. En el caso de España, hay estudios que aseguran que cada niño ingiere 32 kilos de azúcar al año. 

Reducir estas cifras no es un capricho, ya que el azúcar contribuye al sobrepeso y eleva el riesgo de enfermedades cardiovasculares, caries o diabetes, entre otras patologías. Y para conseguir que tus peques reduzcan el consumo de azúcar, hoy te traemos una serie de consejos para tratar de reducir el consumo de azúcar entre tus peques para seguir avanzando en el modelo de alimentación sana y sostenible que forma parte de la filosofía de COMBI CATERING.

Beber agua

Bebe siempre agua.  Para comenzar a reducir el azúcar ingerido de forma efectiva, el primer paso tiene que ser eliminar el consumo de bebidas azucaradas y de zumos industriales. Olvídate de este tipo de refrescos, y sustitúyelos por el agua en comidas y cenas. Lamentablemente, son muchos los niños y  niñas que sacian su sed con refrescos en lugar de hacerlo con agua.

Evita la bollería industrial. Este tipo de productos no son nada saludables. Y de hecho, deberíamos acostumbrarnos a dejar de llamarlos alimentos por la importante cantidad de grasas saturadas y azúcares.

Olvídate de los cereales del desayuno. Los cereales procesados suelen llevar azúcares añadidos en abundancia. Puedes sustituirlos por avena, o por productos que estén hechos al 100% con cereal de grano completo.

No les des cacaos industriales. Para la leche del desayuno, lo mejor es añadirle cacao puro y olvidarnos de los cacaos industriales, que tienen un importante porcentaje de azúcar, mientras que el porcentaje de cacao es ínfimo.

Aumenta la fruta. Como alternativa a los desayunos o meriendas con bollería industrial, apuesta por la fruta. Y si es de temporada, y de cercanía, mejor que mejor.

Frutas

Yogures industriales, adiós. Pueden pasar por sanos porque son de sabor a frutas… pero no lo son. Lo mejor es que coman yogures naturales. Y siempre podéis añadirles en casa trocitos de fruta natural.

Consume productos naturales en lugar de ultraprocesados. No podemos imaginar la cantidad de azúcar que llevan alimentos que en teoría no deberían llevarlos, como por ejemplo la salsa de tomate frito. Para ser conscientes de lo que coméis en casa, nada mejor que mirar las etiquetas para comprobar los ingredientes de cada alimento, y por supuesto, cocinar con productos naturales.

Tomtes

Utiliza especias y semillas como sustitutivos del azúcar. La canela, la vainilla o la nuez moscada son perfectas para aderezar el café, la leche o el té.

Las ensaladas, aliñadas de forma natural. En muchas casas se quiere cenar sano preparando ensaladas, pero la idea se fastidia añadiendo salsas industriales. Salsas que también llevan en ocasiones hasta un 10% de azúcares añadidos. Recurre al aceite, vinagre, sal o pimienta como siempre. Así tus ensaladas serán sanas de verdad.