Sentarse a la mesa y a la alimentación hay una cultura que debemos aprender desde peques. Hay que saber comer, respetar los alimentos, saber qué alimentos nos convienen, de dónde provienen, cómo cocinarlos de la manera más adecuada, pero también hay una serie de normas específicas para comer y sentarse a la mesa que deben adquirirse poco a poco. Hoy en el blog de COMBI CATERING queremos hacer un repaso por algunas de estas normas para comer.

  • Lavarse las manos, imprescindible. Antes de nada, los peques deben adquirir el hábito de lavarse las manos antes de sentarse a la mesa para desinfectárselas y que puedan tocar la comida con seguridad. ¿Y cuando deben empezar a hacerlo? Desde que comienzan a tener autonomía para moverse ellos solos.
  • Sentarse de forma correcta. A la hora de sentarse a la mesa, es importante que sepan que deben de sentarse de forma correcta, y que no pueden estar sentados de rodillas, con un pie sobre la silla, medio tumbados en la silla, con las piernas cruzadas. Por imagen, pero también para evitar problemas en la espalda. Este hábito les costará, porque a fin de cuentas son niños y niñas, y son inquietos/as. Pero deben aprender cual es la postura correcta, para que la vayan adquiriendo poco a poco.
  • Utilizar los cubiertos de la manera adecuada. El paso de utilizar las manos a utilizar los cubiertos para comer es un paso importante en el desarrollo de los pequeños. Aunque sea de forma torpe al principio, hay que trabajar para que adquieran el hábito, que terminará de desarrollarse por completo cuando niños y niñas tengan tres o cuatro años. El uso del cuchillo (sin filo todavía) también será un paso importante para la autonomía de tus hijos.
  • No hacer ruido al comer, y la boca siempre cerrada. Comer con la boca cerrada, y no hablar mientras comemos, es de primero de protocolo. Y es un hábito que hay que aprender desde pequeños. Niños y niñas deben aprender a que nunca hay que masticar con la boca abierta, ni hacer ruidos al masticar, o al beber.

  • Gracias y por favor. Dar las gracias, pedir por favor, cuando te ha pedido que le pases el pan, o que le eches agua, demuestra buena educación, y pone en valor el hecho de que estamos haciendo algo por él.
  • Dar las gracias implica reconocer la bondad, la predisposición o el trabajo de una persona, y en la mesa se dan muchas situaciones en las que es importante agradecer al otro (por ejemplo, cuando alguien te invita a su casa a comer, te sirve agua, te pone la comida en el plato, te acerca el pan…).
  • Poner y quitar la mesa. Desde pequeños deben saber que la casa es de todos, y que todos debemos contribuir a realizar las tareas. Por eso, no está de más que ayuden a poner y quitar la mesa. Primero, como un juego, y luego, como parte de sus tareas para hacerles responsables de parte de las tareas del hogar.
  • Nunca hay que tirar comida: echarse al plato lo que uno se va a comer. Para evitar tirar alimentos a la basura y educarles contra el desperdicio alimentario, niños y niñas deben saber que hay que echar al plato la cantidad justa que uno se va a comer.
  • Con la comida no se juega. Es bastante habitual que niños y niñas jueguen con la comida, la tiren fuera del plato, jueguen con el pan. Y en este caso, no estamos hablando de los niños más pequeños que todavía no controlan los movimientos, hablamos de niñas y niños que ya saben comer con cubiertos. Ya sea por aburrimiento, por llamar la atención, por despistar para no seguir comiendo… Hay que dejarles claro que con la comida no se juega, ni hay que tirarla fuera del plato.
  • La servilleta está para limpiarse. A muchos niños les cuesta utilizar la servilleta. Para ellos, es más cómodo limpiarse con la mano, o incluso con las mangas de su ropa. Pero es un hábito que deben incorporar cuanto antes. De hecho, aunque todavía utilicen babero, se les puede dar ya una servilleta para que se vayan acostumbrado
  • No jugar en la mesa: aprovecha para conversar en familia. Sabemos que el juego va asociado al niño. Pero cuando el peque comience a tener consciencia de las cosas, deben tener claro que cada actividad tiene su lugar, y que la mesa, está para comer. De hecho, el momento de la comida, o de la cena, puede ser un buen momento para estrechar lazos y conversar en familia. En este punto, hay que advertir que hay que padres y madres deben intentar no utilizar el móvil en la mesa para dar ejemplo.
  • No levantarse de la mesa hasta haber acabado de comer. Esta es una de esas normas que han estado toda la vida, pero que se ha ido perdiendo incluso entre los adultos. Pero las normas sociales establecen que hay que permanecer sentado hasta que todos los miembros de la familia hayan terminado de comer. En el caso de los peques, sabemos que esto es complicado por su naturaleza inquieta, o porque puede que los adultos estén alargando la comida o la sobremesa con el café y el postre. En este caso, los peques deben acostumbrarse a preguntar si pueden levantarse.